259,200

Este año tuvo 180 días... o así lo fue para mí, esta afirmación la baso en que el 24 de julio para mi empezó este año cuando en medio de un fortuito evento cósmico María Cristina, tomó la decisión de acompañarme en este duro ejercicio de vivir.
Quizás piensen que 180 días no son muchos, pero cuando lo vemos en perspectiva puede resultar siendo un tiempo difícil de entender y como resulta que yo soy un negado para las matemáticas y tiendo a pensar que las medidas ampulosas siempre son más grandes.. Cosa que ya me explicaron que no es así!
Agarro la calculadora y hago la tarea de diseccionar estos numeritos que no parecen mucho
Quizás el ejercicio se lo deba hacer en submúltiplos y así honrar el hecho de que a mi lado hay una brillante economista, (lo cual por sí mismo ya es un evento singularísimo). De manera que:
180 x 24 = 4320, donde 180 son el número de días multiplicado por el número de horas que suelen tener los días… todos los días… creo que todos...
Cuatro mil trescientos veinte ya suena más importante, pero aun así me las doy de sibarita y hago un cálculo más, al vuelo.
4320 x 60 = 259200, donde 4320 es el número de horas multiplicado por el número de segundos que suelen tener las horas independientemente del cambio inflacionario (pucha es la economista la que habla... juro que no soy yo!!!) Emoticón gasp
Eso ya suena mucho mejor!
Doscientos cincuenta y nueve mil doscientos segundos; tiempo que debo admitir pasó en un cerrar y abrir de ojos, pero que a este humilde ciudadano le iluminó “el profundo de sus adentros” como pocas veces lo hizo alguien.
Por eso y antes de concluir este año, quiero hacer patente mi profunda alianza con este ser lleno de contradicciones, de luces, de música, de magia, de miles de cosas que no comprendo (formulas financieras, por ejemplo) y que día a día voy aprendiendo y apreciando, (por ejemplo ya se lo que son las NEHO’s) Emoticón wink
Un ser con una capacidad para amar que me supera y me sorprende cada segundo de esos doscientos mil y pico que tengo a bien estar a su lado.
Por eso y para concluir la tacita tortura que implica leerme y más aun cuando me lio con números y operaciones matemáticas. Quiero decirte Maria Cristina Campos Rosales que te amo y tengo más de doscientas mil razones para hacerlo!
Feliz año nuevo!!!!